Bienestar emocional

¡Honrar la vida!

Honrar La VidaMúsica y Letra: Eladia Blázquez ¡No, permanecer y transcurrir, no es perdurar, no es existir, ni  honrar la vida! Hay tantas maneras de NO SER, tanta conciencia sin saber, adormecida… Merecer la vida no es callar y consentir, tantas injusticias repetidas… ¡Es una virtud, es dignidad! Y es la actitud de identidad ¡más definida! Eso de durar y transcurrir, no nos da derecho a presumir, porque no es lo mismo que vivir… ¡Honrar la vida! ¡No, permanecer y transcurrir, no siempre quiere sugerir ¡Honrar la vida! Hay tanta pequeña vanidad, en nuestra tonta humanidad… enceguecida. Merecer la vida es erguirse vertical, más allá del mal, de las caídas… Es igual que darle a la verdad, y a nuestra propia libertad ¡La bienvenida!… Eso de durar y transcurrir, no nos da derecho a presumir, porque no es lo mismo que vivir… ¡Honrar la vida! Permanecer y transcurrir NO ES lo mismo que honrar la vida! ¿Cuántos de nosotros/as podemos decir que honramos nuestras vidas? Que agradecemos por cada día vivido y disfrutado? Que comenzamos el día con optimismo, ilusión, entusiasmo o deseo de vivir cada instante como un regalo? Que nos sentimos conformes, satisfechos/as, por lo que somos, y hemos conseguido?VIVIR y no sólo “estar de paso por la vida” implica asumir riesgos, superar miedos y dejar atrás los límites de lo seguro. Por el contrario TEMER LA VIDA, nos condena a una existencia limitada, aburrida, vacía, quejosa, y sólo de pasillo; mirando lo bien que se la pasan los otros/as, pero a mi no me toca nada. Hay tantas maneras de no ser, tanta conciencia sin saber, adormecida… Esta frase me impacta, tan simple, tan cierta, tan presente!Vivimos en un engaño, en primer termino a uno/a mismo/a y, en segundo, de cara a las demás personas. Vivimos portando mascaras que construimos, allá, por nuestra infancia, y llegamos a la adultez sin haber aprendido a quitárnosla. Máscaras que nos sirvieron en su momento para hacer frente a situaciones, quizás, de dolor, de soledad, de desaprobación. Un excelente recursos para la defensa y la protección. Hay personas que no se atreven a asumir riesgos, sea por temor al costo o a las consecuencias que implica. Pero también hay personas  que, reconociendo sus posibilidades, aprenden a confiar en sus recursos y deciden asumir los riesgos necesarios para ganar y descubrir nuevos horizontes y alternativas para afrontar de manera adecuada el día a día. Hay tanta pequeña vanidad, en nuestra tonta humanidad, enceguecida. La humildad parece ser un bien escaso, se desea la grandeza del que mas tiene… en lugar de la grandeza del propio Ser y mundo interior. Merecer la Vida… Es igual que darle a la verdad, y a nuestra propia libertad ¡La bienvenida!… Quien se atreva a vivir su propia vida desde la autenticidad, sin mascaras ni falsas apariencias, asumiendo riesgos a cambio de elecciones, se acercará sin lugar a duda, a la felicidad y plenitud; siendo quien en verdad es.Es posible que en el camino muchos de nosotros/as nos caigamos, nos lastimemos, nos sintamos desamparados, pero… como dice el actor Héctor Alterio en la película Caballos Salvajes: “la puta que vale la pena estar vivo”. Déjanos tus comentarios. Gracias!

¡Honrar la vida! Leer más »

NA Magazine: Gestiona tus Miedos

Diciembre de 2012: Artículo que nos habla sobre el poder que tienen sobre nosotros nuestros propios MIEDOS. Nos limitan para emprender aquellas acciones – personales, familiares, sociales o profesionales- que deseamos y, sin embargo, no nos atrevemos a ejecutarlas. Estos MIEDOS suelen ser “inventados” o “fabricados” por nosotros mismos. Tienen su raíz en nuestra propia historia personal, familiar y sociocultural. Así nos lo cuenta Carina Sampó Franco y de una manera sencilla nos presenta a este MIEDO como: una \»valiosa y necesaria SEÑAL de alarma ante la posibilidad de una amenaza, y como un leal mensajero que viene a traernos un mensaje. Saber descifrarlo correctamente es la Clave

NA Magazine: Gestiona tus Miedos Leer más »

La elección de no ser asertivo/a

Hace unos días, tras una sesión de coaching y de venir trabajado la asertividad en mi cliente-coachee, surgen las preguntas – \»¿Y entonces, no he aparendido? ¿Con esta persona no funciona? ¿Con ella no puedo ser asertiva? ¡No consigo lo esperado!\» Ser asertivo/a también es saber elegir en que momento o frente a quién no serlo. Ser asertivo/a también es darte el permiso de callar o ceder, de esperar el momento adecuado, si quién está delante de tí está en una posición diferente a la tuya.  Puedes elegir expresar tus pensamientos y emociones, reservarlos para otra ocasión o para ti mismo/a. Ante relaciones o posiciones desiguales (empleado-jefe), pregúntate y valora: ¿Sería ecologico para ti? ¿Que ganarías y que perderías? ¿Te compensa o no te compensa expresar lo que piensas o sientes en este momento? ¿Le aportaría algo a la otra persona? ¿En que posición te estás poniendo tú cuando emites tu mensaje? Aquella sesión finalizó con esta simple y muy gráfica metáfora. Aqui te la dejo:          

La elección de no ser asertivo/a Leer más »

Educar Emociones

¿Qué haces tú, ante el dolor emocional de tus hijos e hijas?   ¿Cómo gestionamos el dolor emocional ajeno? ¿Qué hacemos cuando el dolor es el de nuestros hijos e hijas? Nos cuesta muchísimo verlos tristes, nos cuesta mucho más sentir su dolor. No soportamos verlos enfermos, no soportamos verlos sufrir, no soportamos verlos llorar de tristeza, ya sea por causa de un desprecio o un desplante, de esos que se viven en el cole o en el parque, o en un cumple. No sabemos que hacer con su enfado, rabia o frustración, cuando ésta aparece tras no conseguir un propósito, tras perder en un juego de competición, por ser el o la última en… No siempre sabemos que hacer. Es mas frecuente pasar por alto lo que sucede ante la dificultad que tenemos de gestionar el dolor.  Nos esforzarnos para que “no sientan, no sufran”, para que pasen lo más rápido posible la fea experiencia y vuelvan a sonreír. Queremos darles enseguida una solución, una alternativa, un remplazo. Y ahí estamos diciendo que le vamos a comprar otra muñeca, con la intención de “reponer” de “cubrir la necesidad” y que todo vuelva a estar como antes. O bien hacemos lo contrario, no le damos importancia al tema, ignorándolo, cortando el episodio con un “no pasa nada, no es para tanto”. En lugar de, sencillamente, acompañar en su primera perdida. Sí, de esta manera nuestros hijos e hijas viven sus primeras pérdidas, sus primeros dolores, y por tanto estas experiencias se convierten en sus primeras oportunidades para aprender estrategias de gestión emocional. Nos convertimos en “saltadores” o “solucionadores” de problemas en lugar de “buenos escuchadores”. ¿No te ha pasado a ti, cuando has tenido un problema, que lo que quieres es que te escuchen, en lugar de recibir consejos, opiniones y soluciones? ¿Qué te hace pensar que ellos/as necesitan algo diferente a lo que necesitas tú? “¿Qué educación es ésa que habla del mundo en que estamos y calla sobre el mundo que somos? “¿Has compartido con tus hijos/as tus sueños más importantes, tus mayores alegrías o tus decepciones más fuertes? ¿Qué te hace pensar que lo harán ellos/as contigo?” Augusto Cury En ese esfuerzo de evitar que sufran les impedimos aprender a conectar con sus emociones, a identificarlas, a poder hablar de ellas abiertamente, a sentirse seguros/as y comprendidos/as y regularlas adecuadamente… En esto consiste la educación emocional. No se trata de echarnos culpas, ¿acaso nos ha sido enseñado a gestionar las emociones y a mostrar o trasmitir el cómo hacerlo? ¡No! No nos han enseñado a hacerlo. Por eso nuestra labor es tomar conciencia de esta necesidad y asumir nuestra responsabilidad en la educación emocional de nuestros hijos e hijas, primero pasando por nuestra propia conciencia emocional. De las 6 emociones básicas del ser humano (tristeza, miedo, enfado, sorpresa, asco, alegría) la tristeza junto con el miedo, la ira y el asco son las llamadas emociones negativas. A diferencia de la alegría o el amor, que son las llamadas emoción positiva, y la sorpresa que es ambigua ya puede ser agradable o desagradable. Al nombrarlas “emociones negativas” y creer que esa es su única naturaleza, le hemos extirpado -a la tristeza, al miedo y al enfado- su potencial positivo. Si comprendemos que toda emoción tiene su razón de ser y su finalidad positiva, no nos daría tanto miedo sentirlas, explorarlas y darles el lugar que les corresponde en el momento adecuado y con la intensidad que requiera la circunstancia vivida. Para continuar voy a referirme a la tristeza como referencia de una de las 6 emociones básicas. A veces la tristeza es apropiada a las circunstancias, otras veces se alimenta de pensamientos negativos, que nos llevan a “aumentar” innecesariamente nuestro malestar; afectando paralelamente nuestra delicada autoestima. Es necesario y humano, permitirnos sentir la tristeza (como también las demás emociones) y permitirles a nuestros hijos/as sentirla; ayudándoles, acompañándoles y escuchándoles. “El optimismo se construye con el enfrentamiento de los problemas y no con su negación…   Hay un mundo por descubrir dentro de cada niño/a y cada joven. Quién no logra descubrirlo es porque está encarcelado en su propio mundo”. Augusto Cury La tristeza es adaptativa y sana, siempre y cuando la vivamos como un estado transitorio y no permanente. Cuando nos sentimos tristes y atrapados en nuestra tristeza, lo más importante es poder “darnos cuenta” de cómo nos sentimos, sin que intentemos buscar explicaciones, razones o justificaciones. Es necesario darnos permiso y tiempo para recuperarnos de algún episodio doloroso que, a veces, pasamos por alto para no sentir el dolor natural por una pérdida, despedida, cambio, cierre o final. El caso es que, si no lo hacemos, tarde o temprano nos cobrará factura y tendremos que “parar” y mirar a la cara lo que en verdad hay. Esta es la intención positiva de la tristeza. Viene para ayudarnos a sanar. Viene a regalarnos un tiempo útil para la introspección, para expresar el dolor afectivo de una manera adecuada, adaptativa y sana. “Los buenos padres preparan a sus hijos para los aplausos, los padres brillantes preparan a sus hijos para los fracasos”. Y yo añado que padres y madres brillantes son aquellos que preparan a sus hijos e hijas para el dolor, para el NO, para la reflexión crítica, para la pregunta y no tanto para las respuestas, para la introspección emocional, para ser líderes de sus vidas. Para ser emocionalmente inteligentes. Para SER. Anexo: ¿De qué hablamos cuando hablamos de Educación Emocional (EE)? La EE pretende dar respuesta a un conjunto de necesidades sociales que no quedan suficientemente atendidas en la educación formal. Estas necesidades están relacionadas con la regulación de la ira, la ansiedad, el estrés, la tristeza, la impulsividad, la tolerancia a la frustración, los estados depresivos, el síndrome de burn-out, el consumo de drogas, los conflictos, la violencia, el vandalismo, etc. Para ello es necesario desarrollar una serie de competencias básicas para poder hacer frente a los retos de la vida con mayores probabilidades de éxito, desde una

Educar Emociones Leer más »

La intención positiva de la tristeza

La tristeza, ¿Qué imagen, sonido o sensación te genera esta palabra?   De todas las emociones básicas del ser humano, la tristeza junto con el miedo, la ira y el asco son las llamadas emociones negativas. A diferencia de la alegría o el amor, como emoción positiva. En parte, le hemos extirpado a la tristeza su potencial positivo. Si comprendemos que toda emoción tiene su razón de ser y su finalidad positiva, no nos daría tanto miedo sentirlas, explorarlas y darles el lugar que les corresponde en el momento adecuado y con la intensidad que requiera la circunstancia vivida. A veces la tristeza es apropiada a las circunstancias, otras veces se alimenta de pensamientos negativos, que nos llevan a “aumentar” innecesariamente nuestro malestar; afectando paralelamente nuestra delicada autoestima. Es necesario y humano, permitirnos sentir la tristeza. Siempre y cuando la vivamos como un estado transitorio y no permanente. Cuando nos sentimos tristes y atrapados en nuestra tristeza, lo más importante es poder “darnos cuenta” de cómo nos sentimos, sin que intentemos buscar explicaciones, razones o justificaciones. Es necesario darnos permiso y tiempo para recuperarnos de algún episodio doloroso que, a veces, pasamos por alto para no sentir el dolor natural por una pérdida, despedida, un cierre, un final. El caso es que, tarde o temprano, nos cobrará factura y tendremos que “parar” y mirar a la cara lo que en verdad hay. Esta es la intención positiva de la tristeza. Viene para ayudarnos a sanar. Viene a regalarnos un tiempo útil para la introspección, para expresar el dolor afectivo de una manera adecuada, adaptativa y sana. ¿Cuándo se transforma en un problema? Cuando la dejamos estar más del tiempo necesario. O por el contrario cuando nos esforzamos para expulsarla, no sentirla; disfrazándonos de “fuertes”, de “yo puedo con todo” “yo para adelante”. En algunas personas lo que en principio fue una emoción de tristeza, ha llegado a transformarse en una actitud frente a la vida… y en este punto merecería la pena revisárnoslo! ¿Para qué? Para cambiar de enfoque. Sentir tristeza es una opción… Imagínate dos maneras distintas de posicionarnos frente a una misma realidad: – “¿Cómo es posible estar triste, siendo tan hermoso todo lo que me rodea?” – “¿Cómo es posible ser feliz, estando rodeado de tantos problemas, desdichas y maldad?”. La decisión de ser o no feliz, de estar o no feliz, o por el contrario, de estar o no triste, de sentir o no tristeza, depende de nosotros/as mismos/as. Por suerte tenemos a nuestro alcance la posibilidad de elegir y decidir cómo queremos sentirnos. Elegir suele ser difícil para algunas personas, más aún decidir. No basta sólo con elegir. La elección implica una preferencia y un ¿para qué? ¿Qué estoy buscando con esta actitud? ¿Para qué lo hago? ¿Qué quiero conseguir? Por otra parte la decisión es la que nos permite aplicarlo, llevarlo a la acción, ejecutar lo que hemos elegido. A veces pasamos mucho tiempo antes de decidir el qué hacer. Una manera de aplazar, de dejarnos estar sin cambiar. Decidir no nos resulta nada fácil. ¿Por qué? Porque nos obliga a asumir una responsabilidad sobre nuestros actos, a sabiendas de que si algo sale mal, no tendremos a quien echarle la culpa. Entonces, ¿para qué hacerlo? Para obtener la recompensa que nos da la libertad. Libertad para sentir, pensar y hacer lo que realmente queremos. Aunque parece ser que asumir la responsabilidad de nuestras decisiones (acciones) nos cuesta y mucho. Por eso nos encontramos con personas infelices, haciendo lo que otros dicen. Eso sí, con la tranquilidad de poder reprochar, culpar y poner fuera todo lo que no soy capaz de asumir y cargar. Es el precio que pagamos. ¿Que precio pagas tu? Por no saber cómo o no querer hacernos cargo de lo propio es que “la tristeza y la infelicidad” van cobrando cada vez más protagonismo en nuestra sociedad. Comprender la necesidad de un cambio de actitud nos permitirá dar ese paso hacia delante. Es un proceso que lleva tiempo, esfuerzo y, según como elijas vivirlo, puede ser con dolor o placer, con tristeza o alegría. En definitiva, el camino a seguir es uno sólo, aquel que elijas y por el que tu apuestes. Mirar hacia atrás sólo debe servirnos para recoger las enseñazas que nos ha dejado. Autora: Carina Sampó Franco Publicado en emagister

La intención positiva de la tristeza Leer más »

Diez maneras de amarnos!

Tras el taller desarrollado este fin de semana, me reafirmo en algunas ideas. Me gusta el planteamiento de Erich From respecto al AMOR, él nos pregunta: – “¿Es el amor un arte? En tal caso, requiere conocimiento y esfuerzo. – ¿O es el amor una sensación placentera, cuya experiencia es una cuestión de azar, algo con lo que uno «tropieza» si tiene suerte?\» Su desarrollo sobre el AMOR, se basa -según sus palabras- en la primera premisa, si bien es indudable que la mayoría de la gente de hoy cree en la segunda. Cree que lo difícil es encontrar el objeto de amor, es decir, a quien amar, y no en la propia actitud y capacidad de amar. A lo que dice Erich From le sumo las 10 maneras de amarnos por L. Hey \»1. Dejemos de criticarnos. Si nos decimos a nosotros mismos que pase lo que pase, estamos bien y valemos, podemos cambiar con facilidad nuestra vida. Nuestra capacidad de avanzar con el proceso de la vida es nuestro poder. Descubramos nuestras aptitudes creativas, nuestra individualidad y valorémoslos o por esas cualidades que nos distinguen de los demás. Todos tenemos un papel para nuestra estancia en la Tierra y ese lo oscurecemos al criticarnos. 2. Dejemos de asustarnos. Cuando vengan a tu mente pensamientos aterradores, de miedo, inmovilizadores crea un resorte (una imagen muy vivida de algo bello) para reemplazar ese temor por ese bello instante (un amanecer, un abrazo, unas palabras consoladoras de un amigo, la sonrisa de tu hijo…) Di: Ya no voy a pensar en eso (en lo que te asusta) Voy a pensar en puestas de sol… en rosales.Con práctica y haciendo de esto un hábito lo lograrás… Yo agregaría: – Conoce a tus miedos, identifícalos, ponles un nombre y dialoga con ellos. Conoce su historia, preguntales ¿para que están? ¿Cuál es su intensión positiva? ¿En qué te limitan y en queé te protegen? 3. Seamos amables y cariñosos con nosotros mismos. A veces tratamos mejor a los demás que a nosotros ¿porqué no tener paciencia con nosotros mismos, si la tenemos con un niño que está empezando a aprender? deseamos tener las respuestas, ya , ahora sin tener que aprender lecciones o sin dar los pasos necesarios, seamos pacientes. 4. Seamos cariñosos con nuestra mente. Démosle unos minutos al día de meditación, de tranquilidad, de paz, repitámoslos \»te quiero, todo está bien\» 5. Elogiémonos. La crítica deprime el espíritu, el elogio lo levanta. Cuando te desprecias, desprecias al poder que te ha creado. Empieza por cosas pequeñas, proporcionate aliento y apoyo. 6. Amarnos significa apoyarnos. Busca quien te apoye y te acompañe en el proceso. 7. Amemos nuestros rasgos negativos. Sean cual sean nuestras pautas negativas, podemos aprender a satisfacer estas necesidades de forma positiva ¿qué obtengo de ésto? Se honesto contigo mismo y contéstate. 8. Cuidemos nuestro cuerpo. 9. Trabajemos con el espejo. 10. Amémonos Ya, ahora mismo. No esperes a que se hayan arreglado las cosas para amarte, hazlo ya. Una vez que aprendas a amarte a ti mismo, disfrutarás plenamente de todo y todos. Comenzarás a amar y aceptar a los demás Hemos venido a realizarnos a nosotros  mismos y a expresar el amor en su sentido más profundo. Estamos para aprender, crecer, asimilar y proyectar compasión y comprensión…\» Fuente: Extracto de \»EL poder está dentro de ti\» Louise Hay. Pág.122-144 Erich From \»El arte de amar\».

Diez maneras de amarnos! Leer más »

Agradecimiento a LuzNatal, formación de Doulas

  Gracias Yolanda Caballero Gardyn por la oportunidad de formar parte por un fin de semana completo, de ese grupo fantástico de mujeres doulas, de la formación SiendoDoulas. Un circulo perfecto de 10 mujeres ¡Gracias por compartir esa energía femenina y esa valentía de pujar por una vida consciente. Diez mujeres semi-diosas en unidad, en armonía y brillando con una luz única y personal! Juntas hemos mirado a la cara a nuestros miedos: “al dolor, a la enfermedad, a la soledad, a la fusión, a la pérdida, al uso de poder de los otros/as, a la muerte, a la vida, a los opuestos… Y hemos conseguido aliarnos con todos ellos!    ¡Gracias!

Agradecimiento a LuzNatal, formación de Doulas Leer más »

He vivido una GRAN Sorpresa! Sí es posible dar VUELTAS a las cosas!

Ayer mi marido y padre de mis hijas, me mostro una vez más que los sueños son posibles!!! Y que sí se puede DAR VUELTAS A LAS COSAS!!!! Ayer fue un gran día! Nuestra pequeña se graduó!!! Un final de etapa y un comienzo de otra. Se termina la educación infantil y se abre una puerta a otra etapa de su vida: la PRIMARIA. Que mezcla de emociones!!! Un junio intenso, lleno de cumpleaños, de despedidas…. el grupo no seguirá siendo el mismo… con algunos amiguitos/as seguirá unida con otros/as ya no. Es lo que toca, CRECER! Y si! Un día tan importante y papá no podía estar con nosotras. Ulan Bator queda un pelín lejos para hacerte la escapada por una horita y volver al trabajo! Después de pasar el amargo trago de “no podrás estar en este día tan especial”, fui acomodándome a  la idea, restando un poco de importancia a algo verdaderamente importante. Pero la noche anterior a la graduación mis emociones salieron: alegría, tristeza, angustia, alegría, soledad, nostalgia por la familia que no está cerca, fuerza, coraje, alegría, ilusión, amor….   Así comenzó este día: Era un día importante y por ello puse el despertador a las 7,10. Últimamente no pongo despertador porque la más peque es mi despertador,  pero esta vez quería empezar el día antes y con tiempo, tranquilas y disfrutando del gran momento de mi pequeña. Ella tranquila como siempre, la madre no ¡Que nervios! Antes de que sonara el despertador, me despierto exaltada por un ruido en la cocina ¡el microondas!!!  Se disparan mis pensamientos y de la exaltación pase al susto y a la rumiación:  ¿Me dormí? ¿Que pasa en la cocina? ¿De dónde sale ese ruido? ¿Quién ha entrado? ¿Me dejé la llave puesta en la puerta (otra vez)? Salí disparada de la cama. Y del susto pase a la sorpresa paralizante, y ahí me quede mirando. Y mi corazón dio un vuelco. Ahí estaba el papa de mi hija, con el desayuno para 4 preparado y listo sobre la mesa. Ahí estaba sonriendo de felicidad,  tras 24 horas de viaje para estar otras 25 horas en Madrid y regresar a su destino de trabajo, Mongolia… Claro que después de la sorpresa y la alegría vinieron a borbotones las preguntas ¿Por cuánto tiempo te quedas? ¿Quien ha pagado esto? ¿Cómo has arreglado con tu cliente? ¿No está en peligro el trabajo?… Estas loco!!!  ¿Valentía? ¡Admiración! o ¿ Locura total?   Y él me respondió: \»¿Para qué estamos aquí sino para estar en estos momentos únicos? Y volví  a conectar con lo que verdaderamente importa: ¿Para qué estamos aquí sino para hacer posible nuestros sueños? ¿Para qué estamos aquí sino para estar con quienes amamos en el momento justo? Ver esas dos caritas de mis niñas, sonrientes, dormidas y felices, al despertarlas papá ¡no tiene precio!     Ayer lo sentí, lo viví, lo vi, lo escuche. Hoy creo que ¡sí es posible dar vueltas las cosas! Cambiar el mundo por un mundo mejor. Cambiar nuestros hogares por hogares felices. Cambiar nuestras relaciones  por relaciones de amor!!! ¡Que hoy empiece a cambiar el mundo! Y ese cambio empieza por cada uno/a de nosotros/as ¡Hagámoslo juntos/as!       Dedico este post a mi marido y a mis hijas: Cuando recuerdo el día de ayer se me mojan los ojos. Lo disfrute, lo sentí, lo viví, me emocioné! ¡Que hermosa familia tengo, es mi tesoro! Ayer he vuelto a enamorarme! Hoy sigo un poco en las nubes. Gracias!

He vivido una GRAN Sorpresa! Sí es posible dar VUELTAS a las cosas! Leer más »

Admítelo

He leído un texto de Gabriel Sandler “admítelo” y me ha parecido preciso y acertado. La primera frase fue la que llamó mi atención, hace referencia a algo con lo que vengo trabajando desde hace tiempo – el miedo- o la gestión del miedo. “Admite estar asustado y tu coraje aumentará”. Me considero a mi misma una persona miedosa, durante muchos años el miedo se plnató delante de mí sin dejarme avanzar a paso firme y seguro. Paradójicamente hoy me considero a mi misma “experta en gestión del miedo”. Tiene sentido ¿no? Conviví con el miedo como enemigo durante mucho tiempo hasta que un buen día empecé a conocerlo y en ese proceso descubrí recursos y estrategias muy valiosas que me permitieron, acercarme a ellos, dialogar, aceptarlos, reencuadrarlos y aliarme…. Desde entonces convivo con ellos de otra manera, me acompañan, me traen mensajes, me gusta su compañía, he aprendido de ellos y con ellos. No son tan malos como creemos. A mi me gustan, me tranquiliza tenerlos conmigo, de mi depende saber darles su lugar. Hoy cuento con muchísimos recursos y estrategias que puedo compartir con otras personas. Pero es mejor y más importante  que tú encuentres las tuyas propias, que sean a tu medida. En este proceso también puedo acompañarte, para aprender a aliarte con tus miedos, que no te limiten sino que te potencien! Admitir mis miedos me abre puertas, me coloca en otro lugar, me permite un cambio de actitud, hacia la apertura, la aceptación y la acción. “Admite que no lo sabes y aprenderás. Admite tus debilidades y te fortalecerás. Admite tus errores y empezarás a corregirlos”. ¿Te has encontrado alguna vez con personas que todo lo saben? Seguro que sí. Pero hay una cosa que éstas personas no saben, y es que se están cerrando puertas a su crecimiento. La soberbia del que todo lo sabe impide a la humildad la posibilidad de  reconocer fallos, carencias, limitaciones, y con ello limita la búsqueda de nuevos saberes y alternativas. “Admite que no sabes qué decir y habrás dicho justo lo que debías”. Parece mágica esta frase! Que potencia! Cuantas veces echamos a perder un encuentro, una conversación por decir lo que no tenia sentido decir en ese momento, en ese contexto y con esa persona… Reconocer lo que me está pasando por dentro, escuchar mi cuerpo me da las señales para poder poner las palabras “adecuadas” a la situación. “Admite que estás confundido y empezarás a comprender”. Hoy en una sesión surgió la duda y la confusión. Tanto mi cliente como yo conectamos con ello. Eso estaba ahí, un caos, una confusión y desde ahí pudimos dejarnos estar en esa confusión, incluso darnos el permiso para estar perdidas, sin encontrar un sentido… y curiosamente empezamos a ver un poco de luz, un nuevo punto de partida, un pequeño movimiento interior, seguido de un cambio de actitud brutal y potente. Os dejo el final del texto de Gabriel Sandler porque no tiene desperdicio. Cada frase es potente. Te propongo que saques de ellas lo que a ti te sugiere? Que te dicen a ti estás frases? Con que aspectos de tu vida te conecta?   “Admite que eres hiriente y empezarás a cicatrizar las heridas. Admite que te importa y las cosas que de veras te interesan se fortalecerán. A menudo, ser honesto contigo mismo, con los demás, con la vida puede resultar difícil y hasta dar miedo. Sin embargo, la sinceridad es siempre la ruta más confiable, más directa para realmente alcanzar aquello, lo que fuere, que quieras conseguir. Todo intento de engaño terminará siendo un desperdicio de tu valioso tiempo. Vive la verdad de quien tu eres, y así sacarás a relucir el mejor Tú que podrías llegar a ser”. Gabriel Sandler     Alinea tu YO ideal con tu YO real. Es un reto y vale la pena el esfuerzo y más aún la recompensa! Tu autenticidad  da la mano a tu felicidad. Le dedico este post a Mayte! Enhorabuena por el gran paso que has dado hoy en sesión.

Admítelo Leer más »