Cambios del fluir cotidiano

El siguiente post ha sido publicado por M.Paz Pérez Campanero
Gracias M.Paz!

\»Nuestra amiga Carina Sampo escribió hace unos días un post que de nuevo captó mi atención y que quiero utilizar como palanca para hacer aquí una reflexión. Su comentario se titula \»Resistencia a los cambios. ¿Por qué?\»….

…Antes de nada quiero reforzar su comentario sobre la dificultad que tiene afrontar los cambios que te vienen impuestos de una forma u otra, incluso a veces de manera muy dramática. Yo aquí quiero reflexionar sobre aquellos cambios que quizá tienen más que ver con lo que podráimos llamar el fluir cotidiano de nuestra vida. Su comentario me llamó especialmente la atención porque a lo largo de mi desarrollo, tanto personal, como profesional, me he encontrado con muchas resistencias a la hora de introducir cambios incluso muy pequeños, en mi entorno y, por lo tanto, en el de quienes me rodean.

Creo que tiene mucho que ver con lo que podemos denominar \»el círculo de comodidad\». Es decir, todo aquello en lo que te sientes cómodo y que intentas perpetuar, porque cualquier cambio significa incertidumbre, inseguridad, incomodidad y otros muchos sentimientos relacionados con la propia capacidad de afrontar la vida en sí misma y todo lo que tiene de avance y evolución.

Me gustan el minimalismo y la filosofía wabi-sabi (que he mencionado en algunas entradas de hace tiempo en este mismo blog), no porque estén de moda, sino por lo mucho que tienen que ver con la mochila ligera de peso. Creo que con los cambios pasa algo similar. Cuando llevas a la espalda -y por tanto también en tu cabeza y en tus emociones- demasiada carga del tipo que sea, llega un momento en que no dejas que tu propia vida fluya y terminas permitiendo que se estanque… eso sí, en tu zona cómoda, aquella que te permite huir del conflicto, aunque en realidad, si uno lo piensa despacio, eso lo más fácil es que te lleve a conflictos mayores…

Como apasionada de la capacidad creativa y de los procesos de crecimiento y avance, no sólo entiendo la necesidad de los cambios, sino que en gran medida me gusta promoverlos. Esto no es sencillo, porque además de con tu propia resistencia, cuentas con la de los demás, pero lo que sí puedo asegurar es que la sensación, cuando miras hacia atrás y ves tu propio avance, es altamente estimulante y muy liberadora. Os animo a probar. Muchas veces puede uno empezar incluso por cosas tan mínimas como cambiar de sitio esas pequeñas cosas que llevan años en el mismo lugar. De ahí… a los cambios grandes… paso a paso…\»

Publicado por Por M.Paz Pérez Campanero

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