El Psicodrama: motor de GRUPOS dinámicos, creativos y sostenibles

¿Conoces otro método que sea tan completo, profundo, creativo, lúdico, activo, breve, como es el Psicodrama? en este artículo te contaré los…

5 ámbitos dónde aplicar el psicodrama para crear y consolidar grupos

El psicodrama es terapéutico, pedagógico, socioemocional, de crecimiento personal, de desarrollo de la creatividad y de aprendizajes para la vida. Podría seguir enumerando sus múltiples campos de aplicación y beneficios. En América Latina y EE.UU se aplica desde 1960, su riqueza e impacto en el crecimiento de las personas y de los grupos está más que probado.

Un poco de historia…

El psicodrama fue creado por Jacob Leví Moreno en 1921, inspirado en el teatro espontáneo. En él se combina el juego teatral, el juego simbólico, el movimiento del cuerpo, lo intuitivo, lo emocional y lo inconsciente. En psicodrama el pensamiento entra en juego, en último lugar, permitiendo nombrar y narrar de manera diferente las vivencias antiguas –integrando- los nuevos aprendizajes. De esta forma no se descartan las experiencias anteriores por mas dolorosas que hayan sido, sino que, se integran desde una nueva comprensión y sentir que permite reparar, recolocar y transformar lo vivido.

El psicodrama pone el cuerpo en acción, activa la memoria corporal, el registro emocional, lo intuitivo e inconsciente

El concepto espontaneidad-creatividad es el motor básico del crecimiento y maduración de los seres humanos. Su déficit nos lleva a tener dificultad para generar nuestras propias alternativas de solución frente a los retos que nos plantea la vida diaria. Por ello, la esencia del psicodrama consiste en reactivar esta capacidad espontánea-creativa que se nos ha dormido.

Se puede trabajar en grupo, en pareja o individualmente.

J.L. Moreno enfocó el psicodrama principalmente a los grupos por una razón muy sencilla: porque el ser humano vive en grupos, trabaja, aprende, juega y se divierte en grupos. De hecho, la fuerza terapéutica del psicodrama y motor de aprendizajes significativos, provienen de la dinámica y energía del grupo.

El psicodrama es una práctica que se realiza, habitualmente, en grupo y con ello favorece la vinculación emocional, crea una red social sana, multiplica recursos, estrategias y soluciones ante las dificultades o desafíos que se presentan en la vida cotidiana, como es la falta de comunicación afectiva o el sentimiento de soledad cada vez más acentuado hoy
en día.

¿En que consiste el método psicodramático?

Consiste en actuar los acontecimientos relevantes de nuestra vida en lugar de quedarnos sólo en una conversación. Esto implica explorar en la acción, mediante la dramatización, aquellas situaciones significativas de nuestro día a día, sean estas del entorno familiar, laboral, social, académicas o de nuestro mundo interior. 

Estás últimas, son las que no podemos ver, ni tocar, pero sí sentir intensamente y que sabemos que están allí impidiéndonos avanzar. Algunos ejemplos son: los miedos, los dilemas internos, cierta toma de decisiones, inseguridades, auto-exigencias, el critico interior, el diálogo interior destructivos vs constructivos.

El psicodrama nos invita a probar y a mirar desde otra perspectiva, a abrir nuevas posibilidades y generar opciones diferentes para romper con lo repetitivo y recuperar esa capacidad creadora que todo ser humano trae consigo al nacer.

Estas situaciones que dramatizamos las llamamos escenas, como esas escenas de una película que te han impactado y conectado con tu sentir profundo. De forma similar, en psicodrama trabajamos con aquellas escenas de tu vida -externas o internas- que contienen información clave para tu crecimiento personal.

Con psicodrama avanzamos más allá del simple hecho de visualizar como lo haría un observar externo, lo que hacemos es “entrar” dentro de la escena, desde el juego de roles y el juego simbólico, para volver a vivir aquí y ahora, en un entorno controlado y seguro, “eso” que buscamos explorar y comprender porque es de importancia vital para nuestro aprendizaje y desarrollo. Esta exploración, desde lo teatral, lúdico y creativo, te revelará aspectos no vistos, incluso inconsciente y esenciales para salir de dónde estás. Cuando cuentas o narras “lo que te pasa, con el deseo de cambio” solo te quedas con la escucha, la lógica y el razonamiento. El método psicodramático te propone: escuchar, ver, tocar, sentirlo desde otro lugar, con tu propio cuerpo y con el cuerpo grupal y así dar paso a un cambio, sea el cambio que sea, será constructivo, te hará salir de tu patrón habitual, ampliando tus registros de acción y comportamientos.

Te permite crear un nuevo significado de esa vivencia interna que se traduce en cambios externo en ti y en tu entorno a través de ti.

Parafraseando a Jacob Leví Moreno, toda segunda vez vivida teatralmente con la misma intensidad que la primera, libera a la primera.

Esto lo vemos de forma muy clara cuando los niños y niñas juegan a representar roles como una forma de resolver sus miedos, sus pérdidas, sus conflictos. En la simulación o en el “como si” del juego pueden elaborar aquello que les duele, preocupa o desean. Desde esta idea, podemos entender por qué niños y niñas de 3 años piden a sus educadoras de infantil o figuras de referencia, una y otra vez, que les cuenten el mismo cuento de hadas. Es a través de su escucha reiterativa cuando consiguen elaborar y acomodar su mundo emocional interno, como “la separación segura con la madre”, en una etapa clave de su desarrollo socioemocional como es la entrada al cole de mayores.

El juego de roles o técnicas teatrales en las que se fundamenta el psicodrama, ayuda a que niños/as, jóvenes y personas adultas a que se enfrenten todo tipo de situaciones presentes y futuras para aprender a manejarse en ellas, desarrollando habilidades y estrategias sanas; desde exponer una opinión, resolver un conflicto entre partes, hasta cuestiones más relevantes como las pérdidas emocionales.

Ámbitos profesionales dónde se aplica el psicodrama:

  • Ámbito Educativo. Salón de clase. Nivel primario, secundario, universitario, selectividad.
  • Ámbito Social. ONGs, Servicios sociales, Asociaciones Barriales.
  • Ámbito Laboral/profesional: altos lideres, grupos o equipo de trabajo, grupos de formación, re-orientación vocacional o profesional, gestión y liderazgo de equipos de trabajo.
  • Ámbito Familiar: crianza, triangulaciones padre-madre-hijos, formas de establecer vínculos, educación emocional y en valores, familia de origen vs. familia política, limites y acuerdos.
  • Ámbito Relacional: Cómo me relaciono con mis múltiples mundos: pareja, hijos, ocio, salud, trabajo, mis personajes internos, mi saboteador, mi exigente, mi yo inseguro, ni yo “puedo con todo” y muchos mas.

El Psicodrama en el ámbito Educativo
Salón de clase | Primaria, Secundaria, Bachiller, Universidad

El psicodrama en el ámbito educativo permite:

· Sacar fuera, mediante el juego teatral o de roles, pensamientos no verbalizados, poco claros, para permitir poner orden, claridad y estructurar el mensaje que, en verdad, se quiere comunicar.

· Preparar emocionalmente para una situación futura como es el paso del colegio al instituto, dónde pueden surgir miedos, inseguridades, pérdidas, bloqueos o cambios repentinos de comportamientos.

· Entrenar estrategias de mediación y habilidades socio-emocionales para la resolución de conflictos entre iguales.

· Desarrollar estilos de comunicación asertiva, empática, afectiva.

· Entrenar en la gestión de emociones ante cambios inesperados en el núcleo familiar, perdidas emocionales.

· Preparar ante un futuro posible, imaginado, incierto o desafiante: examen, cambio de ciclo educativo, selectividad, entrevista de trabajo u otros que pueden activar miedos, ansiedad, estrés, expectativas, exigencias, auto-saboteos.

· Ayudar a conectar y exteriorizar recursos a la vez que entrenar habilidades nuevas.

El Psicodrama en el ámbito Social y Laboral
ONGs | Servicios Sociales | Asociaciones| Equipos de Trabajo

El psicodrama en el ámbito social y laboral permite forjar grupos o equipos:

  • Sólidos, con una buena matriz de identidad, garantizando su durabilidad, sostenibilidad y compromiso con la tarea y sus objetivos.
  • Abiertos y flexibles al dialogo, facilitando canales de comunicación respetuosa para hacer que lo implícito (lo que no se dice) se manifieste desde un lenguaje lúdico, creativo, artístico y, desde este lugar, es más fácil mirar, sostener y transformar creativamente los conflictos.
  • Con altas capacidades para el aprendizaje y desarrollo de habilidades para la autogestión y la autonomía en entornos complejos.
  • Que consiguen, rápidamente y de manera durable, confiar en su el equipo, en su liderazgo y en su propio potencial creativo para dar respuestas a los desafíos.

El psicodrama en el ámbito familiar, personal y relacional permite:

  • Proyectar un encuentro (simbólico) con quienes no están presentes para poder resolver algo que ha quedado pendiente, decir aquello que no se dijo, reparar y sanar, e incluso entrenarse en habilidades para afrontarlo.
  • Simular y anticipar una situación difícil, vivirla en el juego teatral, preparar posibles escenarios con sus obstáculos y posibilidades, entrenar estrategias o respuestas alternativas para dar la mejor solución.
  • Representar fantasías sobre lo que otras personas pueden estar sintiendo o pensando en relación a nosotros/as, y cómo estas fantasías determinan nuestros comportamientos, pudiendo limitar o potenciar la relación o el vínculo. La representación en el escenario simbólico permite ampliar perspectivas, empatizar, develar lo oculto, comprender profundamente y transformar mi pensar, sentir y actuar de forma inmediata.
  • Explorar aprendizajes heredados para cuestionar y decidir el propio estilo de crianza que se quiere implementar, formas de educar en emociones y valores, poniéndose en el lugar de otros miembros de la familia para comprender desde “dentro” lo que cada integrante siente, piensa y, por ello, actúa de una forma y no de otra.
  • Dar vida a los conflictos, dificultades o necesidades, mediante la personificación de emociones, obstáculos, recursos, caminos a seguir. Comprender las formas de vinculaciones e interacciones del sistema familiar, para reconducir hacia otras mas efectivas y afectivas.
  • Revisar aspectos que limitan o interfieren de la propia familia de origen vs. familia política, aprendiendo habilidades para establecer limites y acuerdos.